divendres, 21 de maig del 2010

Un tren con parada en Patraix


NEUS CAVALLER

"Los primeros niños y niñas que subieron al trenet con las aventuras del Pirata Patachula, y que fueron partícipes de una visión precursora de la enseñanza infantil, se han hecho grandes", recuerdan Ana Nàtxer y Librada Mas, maestras fundadoras de la cooperativa El Trenet, la primera y única escoleta del barrio de Patraix, que hoy cumple 30 años.
Algunos de aquellos maestros repiten ahora su experiencia como padres en su apuesta por sustituir la visión "exclusivamente asistencial" de las guarderías por otra basada en una educación completa desde que los niños nacen. Ese es el caso de Rosa Mestre, que antes fue maestra del centro y ahora es una más de las mamás que han subido a sus hijos a este tren pedagógico.ç
La "apuesta educativa" frente a la visión puramente "asistencial" fue el objetivo clave que se propusieron este grupo de jóvenes docentes, entonces todavía vinculados a la Escuela de Magisterio o a la Facultad de Psicología. "Decidimos impulsar un proyecto que aplicara los conceptos pedagógicos del constructivismo a nivel educativo", han contado Ana y Librada.
Los años han dado la razón a aquella visión impulsada por sus trabajadores. "La misma Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE) recogió en 1990 parte de esos propósitos reconociendo esta etapa como el primer ciclo de enseñanza infantil, creando un currículo propio e incorporando a los colegios públicos el segundo ciclo de infantil de 3 a 6 años", reflexionan.
Con esta visión los miembros fundadores de El Trenet no sólo se avanzaron diez años a los marcos legales posteriores, sino que también fueron visionarios respecto al tratamiento de las lenguas en la enseñanza. "Tres años antes de que la Generalitat aprobara la Llei d'Ús i Ensenyament en Valencià, El Trenet ya ponía en práctica la inmersión lingüística en sus aulas", siguiendo el modelo iniciado cinco años antes por Escola Valenciana, el movimiento de escuelas en valenciano más importante, añade otro padre, Gerard Fullana.
El proyecto, que contó con el beneplácito del primer Ayuntamiento democrático -que impulsó el Patronato de Escuelas Infantiles- se truncó nada más llegó el PP al gobierno local.
La fórmula de "estratificación social" -en la que "el hijo del director de un hospital jugaba con el hijo de un obrero", como recuerda otro fundador, Paco Nàtxer- fue fulminada en 1992 por la edil Dolores García Broch, de Unión Valenciana, que cogobernaba con los populares. El Patronato, que había sido subvencionado por la UCD y el PSOE y exportado con éxito a capitales como Granada, fue clausurado.
Pese a casi 20 años de privatización de este tramo educativo, los niños de esta escoleta pueden seguir disfrutando de una pedagogía constructivista y moderna, gracias al tesón de "maestros y padres que hace 30 años se subieron a este tren con parada en el barrio de Patraix", resume Fullana.